RFID es una tecnología flexible que es fácil de usar y muy adecuada para operaciones automáticas, combina ventajas no disponibles en otras tecnologías de identificación. RFID no requiere de contacto ni línea de visión para operar y puede funcionar bajo una variedad de condiciones ambientales.
Ondas de radio transfieren datos entre un elemento al que está unido un dispositivo RFID y un lector de RFID. El dispositivo puede contener datos sobre él, como una descripción, a qué hora el equipo viajó a través de una zona determinada, tal vez incluso un parámetro tal como la temperatura.